C3, Cables y Componentes para Comunicaciones, S.L., empresa del Grupo Cofitel, presenta su gama de comprobadores e identificadores para fibra óptica con la introducción de nuevas fuentes de luz visible.

Destinada a facilitar la gestión de cordones de parcheo e interconexión entre armarios y racks, esta gama de instrumentos de manejo sencillo e intuitivo permite la identificación de latiguillos con o sin señal, la localización de tráfico sin generación de interferencias y la detección de enlaces dañados o con problemas como curvaturas y empalmes defectuosos.
Las dos principales novedades en el catálogo de fuentes de luz visible de C3 son los localizadores visuales EXFO FLS-240 y VFL-250, dirigidos a instaladores y responsables de mantenimiento.
El EXFO FLS-240 es un localizador visual de fallos de estructura sólida y resistente al agua, que inyecta en la fibra una señal visible a 635 nm (continua y pulsada), se caracteriza por un emisor láser de Clase 2 y compatibilidad con adaptadores para férulas de 2,5 mm (conectores SC, LC, ST) y 1,25 mm (conectores LC). 

Alimentado por dos baterías tipo AAA alcalinas, el FLS-240 proporciona un servicio continuo durante cincuenta horas y posee un alcance típico de 5 kilómetros, pudiendo variar en función del tipo de fibra o cordón.
De cómodo formato cilíndrico (tipo linterna), el FLS-240 pesa 120 gramos (con baterías), tiene un diámetro máximo de 20,5 mm y longitud de 170 mm. Se suministra equipado con un mosquetón para fijación a cinturón.
Por su parte, el VFL-250 realiza funciones similares al FLS-240, pero es un modelo más económico, con un adaptador único para conectores de férula de 2,5 mm. La inyección de señal, continua y a 2-3 Hz, es efectuada por un diodo láser clase 3 (650 nm, l nominal). Con alimentación mediante baterías AAA y reducidas dimensiones (diámetro 13,5 mm, longitud 170 mm, y peso 88 gramos)

EXFO FLS 230 A
La oferta se completa con la fuente EXFO FLS 230 A, con formato estándar para equipos de medida portátil (227 x 120 x 60 mm, peso 0,75 kg), diseñado para emitir, de forma continua o a 1 Hz, durante todo el tiempo necesario, al contar con tres posibilidades de alimentación: baterías recargables de NiCd; baterías alcalinas de 9 V o alimentación directa desde la red.
La fuente FLS 230 A cuenta con un emisor láser de alta potencia (1 mW de potencia máxima de salida), lo que proporciona visibilidad a 650 nm a una distancia de hasta 5 km (alcance típico).
Dispone de una resistente carcasa de policarbonato a prueba de golpes.

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