No es solo una tendencia, es una innovación estratégica que está cambiando la manera en la que los proveedores de servicios de comunicaciones (CSPs) aprovechan la próxima oleada tecnológica en sus redes
El corazón del transpondedor delgado
Los transpondedores delgados son módulos de transmisión óptica coherente diseñados para ofrecer hasta 800 Gb/s por longitud de onda en un formato compacto. Las redes de transporte óptico tradicionales se han basado durante mucho tiempo en transpondedores alojados en grandes sistemas, voluminosos, que consumen una gran cantidad de energía. Sin embargo, la evolución óptica y los procesadores de señal digital (DSP) han permitido desarrollar estos módulos compactos y altamente eficientes.
Estos módulos ofrecen:
- Alto rendimiento en formato compacto: permiten transmitir hasta 800 Gb/s por longitud de onda en un factor de forma QSFP-DD conectable, aproximadamente del tamaño de un dedo, facilitando su despliegue en entornos con limitaciones de espacio.
- Eficiencia energética: gracias a su diseño y a los avances en DSP, el consumo se ha reducido significativamente en la última década, pasando de 4 W/Gb a 0,1 W/Gb, lo que contribuye a reducir la huella de carbono de los centros de datos y redes metropolitanas.
- Modularidad y flexibilidad: se ubican entre los sistemas DWDM tradicionales y las soluciones IPoDWDM enchufables, ofreciendo la combinación ideal de rendimiento, coste y simplicidad operativa. Este modularidad permite a los operadores desplegar solo lo que necesitan, donde lo necesitan, sin depender de costosos sistemas basados en chasis o transpondedores de gran capacidad.
- Compatibilidad y gestión sencilla: mantienen la separación entre la capa IP y la óptica, lo que facilita la interoperabilidad entre proveedores, la integración en arquitecturas existentes y la gestión independiente de la capa de transporte óptico.
En resumen, los transpondedores delgados representan una solución híbrida que combina lo mejor de los sistemas tradicionales de transporte óptico y de las implementaciones IPoDWDM, ofreciendo un equilibrio entre alto rendimiento, eficiencia energética y flexibilidad operativa, preparado para los retos de las redes ópticas modernas.
La triple promesa del transpondedor delgado
1. Baja potencia por bit: Los transpondedores delgados aprovechan dispositivos coherentes como el 800G ZR, logrando eficiencia energética líder, con menor consumo por gigabit transmitido, lo que permite redes más sostenibles sin perder rendimiento.
2. Bajo costo por bit: Su diseño modular reduce CAPEX y OPEX, permite desplegar solo lo necesario y evita depender de sistemas de gran capacidad costosos o sobre aprovisionados.
3. Flexibilidad operativa: Mantienen la separación entre capa IP y óptica, facilitando la integración en redes existentes y la gestión independiente, incluso cuando los rúters o proveedores no soportan la última tecnología coherente.
Casos de uso que demuestran su valor
Los transpondedores delgados se destacan en escenarios donde eficiencia y flexibilidad son críticas:
• Redes metro y regionales: maximización de capacidad con bajo consumo energético y mínima huella física, donde las limitaciones de espacio, potencia y costes son más altas.
• Interconexión de centros de datos (DCI): enlaces de alta capacidad y baja latencia que se implementan de manera modular.
• Servicios mayoristas y empresariales: actualizaciones incrementales sin necesidad de reemplazar toda la infraestructura, donde pueden permitir una conectividad flexible basada en acuerdos de nivel de servicio (SLA) sin necesidad de sobre construir y al mismo tiempo mantener la separación de los dominios óptico e IP.
Preparando el camino hacia redes ópticas más sostenibles y escalables
Los transpondedores delgados representan un punto medio estratégico entre los sistemas DWDM tradicionales y la integración IPoDWDM, ofreciendo actualizaciones graduales, interoperabilidad multivendedor y escalabilidad a prueba de futuro, con menor complejidad y coste. Su capacidad para transmitir hasta 800 Gb/s en un espacio reducido y con bajo consumo los convierte en elementos clave para la próxima generación de redes ópticas. Además, su modularidad y apertura los hace ideales para entornos de redes definidas por software (SDN), facilitando la automatización, la gestión programable y la visibilidad de la red. Para operadores que buscan modernizar sus infraestructuras sin cambios disruptivos, los transpondedores delgados ofrecen un camino claro hacia redes más eficientes, potentes y sostenibles.
Autor: Por Christian Uremovic, Senior Director of Solution Marketing at Nokia
